Con ganas de gresca

Con ganas de gresca

Anoche no estuve allí,
no pude acudir contigo,
no porque yo
no quisiera,
sino porque yo
no pudiera,
después supe
que no fuistes,
que tú tampoco
habías ido,
aunque a tí nada
ni nadie,
te lo había impedido,
y esta noche
al hablarte,
tu respuesta
fué una ofensa,
yo a ti nunca
te he entendido,
qué es lo que
siempre te pasa,
si es porque
no lo tienes claro,
o porque
te gusta la gresca.

Deja una respuesta

Tu email nunca se publicará.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies